
Enkanomiya dispone de muchos enemigos a lo largo de su extenso territorio, algunos ya vistos previamente en otras regiones del juego mientras que otros son propios de esta apartada zona.
Dragartos de las Profundidades
Los dragartos de las Profundidades son las criaturas que habitaban Enkanomiya antes del descenso de la humanidad.
Su descripción dentro del juego reza: «Un poderoso grupo de Dragartos de las Profundidades. Son tan fuertes gracias a que los habitantes de Enkanomiya los criaron y los seleccionaron. Por supuesto, los Dragartos no lo consideraron como un favor. Los más poderosos entre ellos son capaces de utilizar varios elementos para descargar su furia sobre cualquier intruso.«


Existen dos tipos de Dragartos: los Dragartos Primordiales y las crías de Dragartos.
Los primeros se caracterizan por unas tonalidades añiles y pequeños detalles azules sobre su piel y aletas. Estos controlan el elemento hydro. Por otra parte, las crías pueden verse representadas tanto por una piel azul clara y aletas reemplazadas por estalagmitas, señalizando el control del elemento cryo como por una capa de piel morada, aletas teñidas por un rosa pálido, indicando el dominio del elemento electro.
Emisarios del Abismo
También conocidos como Heraldos, son enemigos de élite que pertenecen al abismo. Cada uno posee una descripción y habilidades propias, aunque parecidas.
Estas criaturas crean orbes elementales que inflingen daño al jugador dependiendo de que poder dominen y, cuando se encuentran con meos de un cuarto de vida, se protegen con un escudo elemental.
El único emisario con el que se puede interactuar es Enjou, el heraldo pyro, a quien conocemos durante la misión Alba y Crepúsculo en Byakuya.





Otros enemigos
Máquinas de las Ruinas
Este conjunto de enemigos forman parte de la familia de enemigos llamada «Autómatas». Por la descripción del Guardián de las Ruinas, podemos deducir que fueron creados en Khaenri’ah, el imperio que desapareció tras la catástrofe de hace quinientos años.
Se pueden encontrar en Inazuma y en Sumeru también.








Magos del abismo
Estas pequeñas y traviesas criaturas pertenecen a la Orden del Abismo. Se encuentran distribuidos por todo Teyvat.
Se protegen con un escudo elemental a la hora de pelear contra el personaje principal, lanzando diferentes ataques y teletransportándose constantemente. Cada escudo tiene vulnerabilidad a su elemento contrario (ejemplos: el escudo cryo se rompe con el elemento pyro, el escudo electro con el elemento dendro, etc).
Una vez que el escudo se destruya, será enviado a un estado de aturdimiento donde el jugador puede golpearlo sin temor a represalias.

Hilichurls
Son los habitantes primitivos de Teyvat.
Su forma es similar a la humana, pero les falta inteligencia y espiritualidad. Según los registros, llevan más de mil años deambulando por estas tierras, pero no tienen civilización ni escritura.
Tras el desastre ocurrido hace medio milenio, se dispersaron por todo el mundo. Aunque no son especialmente fuertes ni saben organizarse, en ocasiones pueden provocar más de un quebradero de cabeza.
Se pueden encontrar en toas las regiones de Teyvat.




Espectros elementales
Son unos monstruos nacidos de una alta condensación elemental, capaces de flotar en el aire.
Sus apariencias, como todas las demás criaturas, varía según el elemento que dominen, así como sus ataques.
También se encuentran en Inazuma.



Megafloras
Estas curiosas plantas se mimetizan en el entorno y puede aparecer de la nada o interactuando con inocentes flores del suelo al querer recogerlas.
Estas plantas acechan en el subsuelo y tienden emboscadas a sus presas cuando las atrapan desprevenidas.
Atacan con misiles elementales producidos tras cerrar sus hojas. También pueden generar un escudo elemental para protegerse.
